luchamos contra el viento, largamos paso,
rompemos con el demoledor tiempo,
La simpleza entra en faena y reflexiona,
vista penetrante vuelta allá el ocaso,
acariciamos con lúgubre nostalgia,
existencia sencillamente derramada.
Choca la razón y desasada toda,
intranquila lucha por mantenerse,
sabe que pronto llegará el balance,
qué hacer con ese estrépito dilatado.
Oh! vida dulce amada ¡Vida mía!
semejante riña de batalla campal,
ayer soberbia entregada,
hoy nostalgia señalada.
"ayer soberbia entrega..."
ResponderEliminaresos caminos andados en ocasiones dejan huellas que se recuerdan con gran nostalgia y no se quieren dejar atras...
abrazos
=D