hombre apasionado, humilde, luchador,
daría mi vida por verte feliz.
Si yo fuera... yo soy,
canto verde en azul profundo,
rojo saltarín, rincón amarillo,
Si yo fuera, no sería yo
sino lo que tú ves de mí
Son demasiadas vidas rotas
Hace 11 meses
Se es muchos en uno, lo que ven los demás, lo que ve uno mismo, lo que siente, lo que....
ResponderEliminarVeo que al final ya has escrito en tu blog, por lo tanto ya puedo darte las gracias por pasarte por mi casa y como regalo de bienvenida un poema de Carlos Marzal en mi voz, pincha en:
pluscuamperfecto de futuro
Saludos
quedo re bien y pues apesar de que la poesía no es lo mio y nunca lo sera áspero poder redactar frases así para un ser amado
ResponderEliminaratt: luis fernando guacaneme porras
este poema quedo bien redactado ojala yo pueda sacar versos asi
ResponderEliminarRincon
Esta Es Una Buena Forma De Expresar Los Sentimientos Mas Profundos, Y hacerselo Saber A La Persona Amada.
ResponderEliminarAtt: John Jairo Mendieta Pacheco
apesar de ser corta es muy hermosa. Frente al amor un simple te amo es un amor que puede ser familiar paternal o simplemente un amor de una linda relación
ResponderEliminarSecretos de la Luna escondidos en tu mente
Ahora tu, dulce Vampiresa
Has sido abrazada por la noche
Como una llama que es apagada por el agua
Como el frío abrego que se desliza por la cascada.
Tus secretos se guardan fríamente
Con tu velo dorado
Tus alas sagradas evocan
Antiguas maldiciones
La congelante noche
Deja el lirio somnoliento
En medio del lago tu cuerpo friolento
Un réquiem nocturno
Un delirio taciturno…
… Un deseo para ti mi amada
Cuyos rojos labios, yo deseaba.
Ahora la brisa te envuelve
En la mística bruma del mar
En la noche la Luna roja vuelve
Con los himnos de las sombras se va.
Pero los secretos de la Luna
Siguen escondidos en tu oscura mente
Las ninfas con su blanca espuma
Dejan pálidamente a la muerte
Que desea encerrarte en su rojo desván.
¿Qué es lo que pasa por tu cerebro?
Tus plumeadas alas doradas
Sobre el castillo donde las gárgolas
Miran fijamente a mi amada Condesa
Una mirada de odio
Una mirada envidiada…
Aun los alados serafines te miran con temor
Tu belleza los ha segado
Al límite de quedar muertos;
Aun los alados querubines te miran con rencor
Desde aquel reino prodigioso
Él cual es de un ser llamado: “Dios
jenny lorena osorio rojas